
Día de publicación: 2025-04-21
Por: El Imparcial
“Esta noticia ha conmovido a todo el mundo, también aquí, en Roma, hay mucha tristeza, pero hay esperanza también, porque ese ha sido su legado, que fuéramos peregrinos de esperanza en este año jubilar, como así lo nombró”, compartió.
Un ambiente de tristeza y de conmoción se ha estado viviendo, desde esta mañana, en Roma y en el Vaticano, tras la muerte del Papa Francisco, pero también reina la esperanza, una de las principales enseñanzas que ha dejado para el mundo, expresó el sacerdote hermosillense José Carlos Martínez Clark.
El presbítero conocido como “Padre Tato”, quien se encuentra en el Vaticano estudiando la Licenciatura en Sagrada Liturgia, en el Colegio San Anselmo, Pontificio Instituto Litúrgico, resaltó la tristeza que la muerte del Santo Padre ha dejado en los corazones de los feligreses católicos.
"En el Vaticano se siente un ambiente triste, de la pérdida del sumo pontífice, sobre todo, porque ayer lo vimos dando la bendición de la Pascua y ahora despertamos con esta noticia, del triste fallecimiento.
"Pero sobre todo, hay esperanza, a pesar de su muerte”, resaltó, “porque creo que el gran legado que nos dejó el Papa Francisco es la esperanza y fue lo que tituló a este año jubilar, que fueramos peregrinos en la esperanza. Una esperanza que precisamente celebramos en la Pascua”.

Aunque no tuvo la oportunidad de conocer de cerca al Papa Francisco, el padre José Carlos destacó la humildad que caracterizó siempre al pontífice, quien rompió los paradigmas y tradiciones de los protocolos de cómo debe ser un papa, sobre todo, en sus últimos días de vida.
"Recordemos que, además de ser el primer papa latinoamericano, también fue el primer papa jesuita y cargó con toda su espiritualidad ignacia, todo lo que aprendió en su formación, también la dejó plasmada en sus escritos, sobre todo, su humildad, que es una característica muy personal de él.
"Al final de estos últimos días, lo vimos sin su sotana blanca, visitando San Pedro”, resaltó, “y eso, es algo inimaginable para antes de un papa, que se acercó a hacer una oración, ya enfermo en su silla de ruedas, pero sin su vestimenta del Santo Padre”.
Confiar en su legadoPor la incertidumbre que pudiera existir o por el dolor que siente el mundo tras la muerte del Papa Francisco, el Padre Tato exhortó a los feligreses a confiar en las propias palabras del pontífice y en su legado, que se basa en la esperanza y así lo plasmó en sus escritos que dejó.
"Yo lo que pudiera decir es que confiemos en las palabras del propio Papa Francisco: ’La esperanza no defrauda‘. La esperanza en que lo que hizo que el Papa Francisco tenga mucho fruto, algo muy diferente, algo muy bueno para todos, para toda la Iglesia.
"Esperanza en la resurrección, sobre todo, pues el Papa Francisco no queda aquí en su muerte, sino que confiamos en que resucitará algún día en Jesucristo y tener esperanza, también, en el siguiente pontífice que será elegido por el Espíritu Santo, que será la persona adecuada para estar al frente de la Iglesia y será lo que sin duda, necesitaremos para seguir adelante con nuestra fe”, apuntó.