NECESIDAD DE INVOLUCRARSELaura
Fernanda Guadalupe Bracamontes, de 18 años, expresó que esta actividad,
aunque fue planeada de manera apresurada, sentían la necesidad de
involucrarse aún más en las acciones de concientización para las nuevas
generaciones.
“Respecto
a la idea de hacer estas jornadas para concientizar a los niños y a los
jóvenes empezó desde el aniversario pasado, pero lo llevamos a cabo
este año”, mencionó.
Con varias semanas de planeación, así como con el apoyo y permiso de sus
padres, los jóvenes trazaron una estrategia para brindar información en
caso de un siniestro, hubo personal de Protección Civil y platicaron
con los niños y jóvenes sobre lo sucedido.
“Ellos
ya tenían un poquito más de conocimiento que es lo que nos impresionó,
por así decirlo, nos impresionó por el hecho de que como son niños casi
no se les cuenta este tipo de cosas que son importantes”, dijo.
PLÁTICAS Y TALLERESDurante
poco más de dos semanas, más de 50 jóvenes sobrevivientes participaron
en las actividades, en las por casi dos horas impartían pláticas y
talleres.
Aunque
para muchos de ellos sigue siendo un tema delicado abordar lo que
enfrentaron, debido a que gran parte de su vida han vivido con las
secuelas, consideran que es importante no dejar pasar la oportunidad de
hablar con los más pequeños.
“Buscamos que esto que nosotros estamos haciendo sea de mucha ayuda para los niños y jóvenes”, expuso Laura
Fernanda, “que ellos sepan estas medidas de seguridad, eso es lo que nosotros esperamos”.
A
16 años del incendio, los jóvenes expusieron que el recordar la fecha
es doloroso para ellos, ya que el malestar físico les impedía hacer su
vida de forma regular y eran constantes las visitas con los médicos y
especialistas.
“No
era lo que nos dijeran nuestros papás, sino como nosotros nos sentíamos
por nuestros problemas respiratorios”, contó Laura Fernanda, “había
actividades donde nosotros no podíamos ser partícipes, por más que
quisiéramos como lo es un deporte”.

Integrantes
de la agrupación Salud y Justicia Sobrevivientes ABC, dan una platica a
alumnos de la primaria “Manuel González Franco”. FOTO: ESPECIAL
SECUELAS DEL INCENDIORebecca Jáuregui Rodríguez, de 18 años, manifestó que los problemas respiratorios le han acompañado gran parte de su vida.
“Siempre termino como agitada, me falta el aire”, compartió, “sí es muy difícil, sobre todo el hacer estas actividades”.